Protecciones solares
El sol hoy en día no sólo entraña agradables beneficios, también serios riesgos contra los que hay que tomar las medidas adecuadas.

Exponerse a la luz natural del sol proporciona algunos efectos beneficiosos. Gracias a ésta se produce vitamina D en el cuerpo, que es imprescindible para mantener en buen estado los músculos y los huesos, además de otros posibles efectos beneficiosos para la salud.

El pasado mes de septiembre la Comisión Europea aprobó una nueva directiva que regula la clasificación y los requisitos de eficacia de las cremas solares.

Y es que La legislación de la UE ha hecho enfasis en que ninguna crema, por muy alta protección que tenga, protege completamente contra el sol.

Esta legislación pretende poner algo de claridad ante la variedad de protecciones disponibles.

Pues bien el factor va ahora acompañado de una clasificación (protección baja, media, alta o muy alta).

Ahora, las numeraciones se reducen a ocho desapareciendo las menores de 6 y las superiores a 50, que quedan englobadas en un 50+.

La UE también nos deja claro, que un factor superior a 50 no aumenta la protección contra las quemaduras y la radiación UVB en una piel normal. Y que si un producto se aplica correctamente, un SPF de categoría 'media' (15, 20 ó 25) es suficiente para proteger a una persona con una piel normal.

Exponerse a la luz natural del sol proporciona algunos efectos beneficiosos. Gracias a ésta se produce vitamina D en el cuerpo, que es imprescindible para mantener en buen estado los músculos y los huesos, además de otros posibles efectos beneficiosos para la salud.